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Cómo el colonialismo árabe conquistó el Oriente Medio


Foto: Pixabay

Los países europeos han tomado más refugiados de lo que pueden manejar, sin embargo, ninguno de los países ricos del Golfo Pérsico ha tomado en un solo refugiado, a pesar de que están situados cerca de las áreas bajo ataque. Curiosamente, Arabia Saudita se ha ofrecido a financiar la construcción de 200 mezquitas en Alemania para los refugiados. ¿Por qué mezquitas? ¿Por qué no más vivienda para aliviar la carga de Alemania y otros países europeos? ¿Por qué no alojar a tres millones de familias de refugiados que puedan alojarse inmediatamente en los campamentos ya existentes en Arabia Saudita? Tres millones de tiendas resistentes al fuego con aire acondicionado están allí vacías.

Para abordar estas cuestiones, tendríamos que examinar una breve historia de la región.

Al referirse a Oriente Medio, la gente asume automáticamente que uno se está refiriendo a "árabes" y "musulmanes". Entonces, ¿cómo se convirtió toda la región en árabe musulmana cuando en realidad es una región compuesta por una mezcla diversa de etnias y religiones?

Originalmente los árabes eran una minoría en el Medio Oriente; existieron predominantemente en la Península Arábiga. ¿Cómo se expandieron? ¿Qué pasó con las otras naciones a su alrededor? ¿Se desvanecieron?

Las respuestas a las dos últimas preguntas son: no, no desaparecieron, todavía viven en su tierra ancestral hasta el día de hoy, sin embargo, han tenido muy poco reconocimiento internacional o ninguno en absoluto. Los árabes han logrado convencer a millones de personas de la región de que comparten la misma identidad.

Esto no sucedió de la noche a la mañana, sino pasaron muchas generaciones hasta que las identidades originales de estos pueblos fueron borradas de su psique. Esta campaña comenzó con las conquistas árabe-islámicas de las naciones vecinas, a través de estas invasiones las naciones fueron hechas para someterse a la nueva religión, el Islam, así como someterse a una identidad completamente nueva, la identidad del invasor. Las lenguas nativas fueron prohibidas, las nuevas generaciones abrieron sus ojos a una lengua, el árabe, aunque los dialectos árabes adoptaron muchos de los idiomas regionales hasta hoy día. De hecho, es casi imposible que un "árabe" de Irak entienda a un "árabe" de Marruecos, y viceversa. Después de todo, ¿por qué un marroquí entendería palabras babilónicas o sumerias? ¿Y por qué un iraquí entendería el lenguaje afro-asiático tamazight / bereber?

El objetivo último de las invasiones islámicas era acumular grandes riquezas bajo la pretensión de difundir el Islam. La prueba de esto es cómo en el año 644 de la era común el líder islámico Umar Bin Al-Khat'tab dio órdenes de no avanzar a través del río Indus en Sindh después de que se enteró de que la región era pobre y relativamente estéril, y casi no la tuvo en cuenta para el califato.

Aunque algunas naciones lograron sobrevivir étnicamente hasta el día de hoy, la mayoría de las naciones bajo el control islámico-árabe poco a poco llegaron a ser conocidas también como árabes. Esta fue la primera fase de la crisis de identidad de la que sufrieron los nuevos árabes, pero esto fue sólo el comienzo.

La “Edad de Oro” no-árabe del Islam

Otro término que hemos oído es "La Edad de Oro del Islam", donde los pensadores y los científicos florecieron en Bagdad, la capital de la dinastía abásida (mediados del siglo VIII - XIII). En esta época, los califas (gobernantes) ofrecían los fondos esenciales para la investigación y el ambiente apropiado para el crecimiento. Al igual que la investigación moderna, las oportunidades se encuentran donde está la financiación; por lo tanto los pensadores y los científicos llegaron a Bagdad de varias partes de la región, donde fueron recibidos para realizar su trabajo. Muchos de estos hombres no eran árabes, sino que adoptaron nombres árabes como una forma de respeto por el califa que los acogió y para poder integrarse en su nuevo entorno. Sibawayh, que es conocido como el "Padre de la Gramática Árabe", no era árabe, sino de etnia kurdo-persa del Kurdistán oriental (el actual Irán).

Muchos de los muy reverenciados científicos y pensadores de la época eran ateos o agnósticos, y fueron perseguidos o asesinados por apostasía en nombre de la religión. Entre estos hombres estaban Ibn Al-Haitham, Al-Jaahidh, Al-Kindi, Ibn-Sina, Al-Farabi e Ibn Rushd. Uno de ellos fue quemado vivo junto con su casa, mientras que varios fueron puestos bajo arresto domiciliario por el resto de sus vidas.

La persecución de estos hombres fue desencadenada por el famoso Imam Al-Ghazali, quien anunció que la matemática es obra del diablo. Ese fue el comienzo del fin de la irónicamente llamada Edad de Oro del 'Islam'.

La arabización forzada de los europeos

Avanzando hacia el siglo XX, la región fue testigo de una mayor arabización; pero esto no fue llevado a cabo por los árabes mismos, sino sorprendentemente por las potencias coloniales post-Primera Guerra Mundial. Las potencias occidentales endosaron la identidad árabe en la región, haciendo más difícil para otros pueblos indígenas tener una voz independiente. Esta era se destacó por el establecimiento de los estados árabes; nuevos estados con nuevas fronteras, y un idioma oficial, el árabe. Las potencias coloniales también eligieron a una tribu árabe, los hachemitas, para ser nombrados como realeza en estos nuevos estados. Esto se dio cuando la familia saudita llegó a gobernar Arabia, y sus primos gobernaron Jordania, Irak, y otras partes de la región. Estos reyes fueron elegidos basados ​​en un solo criterio, su lealtad a las potencias coloniales. Una relación que hasta el día de hoy ha dado a esta familia una carta blanca, no sólo en Arabia Saudita, sino en los asuntos mundiales.

En esta fase, muchas de las naciones indígenas de Oriente Medio fueron sometidas al dominio de los árabes, aunque vivan en sus tierras ancestrales, hablan su propio idioma y disfrutan de su cultura distinta y su patrimonio antiguo. El Tratado de Sèvres (1920) vio la partición del Imperio Otomano después de la Primera Guerra Mundia. Fue con este tratado que la región se dividió en estados sin consideración por los grupos étnicos. Como resultado, muchas naciones sufrieron, a saber, kurdos, asirios, caldeos, amazighs y otros. El Kurdistán, que tiene una población de unos 50 millones de habitantes, fue dividido en cuatro partes, cada una de ellas fue entregada, con tierra, población y barriles de petróleo, a una nación vecina, acoplándose a los nuevos estados de Irak, Siria, Irán y Turquía.

El panarabismo de los años 50

La década de 1950 conoció un nuevo movimiento, el panarabismo. Esta sería la tercera etapa en la arabización del Medio Oriente. Es importante señalar que al mencionar el Medio Oriente, también se incluye el norte de África, aunque no es geográficamente parte de Asia Oriental; es otro resultado de las invasiones árabe-islámicas.

El panarabismo vio el aumento de las revoluciones que derribaron varios reinos en la región, y la instalación del ultra-nacionalismo árabe. Después de leer las dos primeras etapas de la arabización del Medio Oriente, puede darse una idea de cómo los árabes tratarían a los grupos étnicos indígenas restantes en esta nueva etapa.

El día antes de la expiración del mandato británico (mayo de 1948), se estableció el estado de Israel. Al día siguiente, cuatro ejércitos árabes atacaron a Israel, comenzando lo que se conoce como la guerra árabe-israelí de 1948. Esta era vio también la expulsión masiva de judíos de países del Medio Oriente que han sido sus hogares durante dos mil años. Así que los judíos escaparon de la persecución de lo que habían conocido como "hogar" y se dirigieron a su tierra ancestral, dejando atrás sus casas, posesiones, amigos y seres queridos enterrados en esos estados.

Desde entonces, se han llevado a cabo muchas campañas de limpieza étnica y genocidios contra las naciones indígenas de Oriente Medio. En Irak, a los asirios y los caldeos que forman la población cristiana en Irak, se les dio una opción; o someterse al gobierno y cambiar oficialmente su etnia a “árabe” o pagar las consecuencias. La mayoría se sometió al gobierno para evitar la persecución, mientras que algunos pocos abandonaron sus hogares y se unieron a la revolución kurda en el norte del país.

Los amazighs en el norte de África son otra nación indígena; tanto la islamización como la arabización de su región alteraron en gran medida su sociedad y su cultura, insertando nuevos caminos y un nuevo lenguaje en sus vidas.

Los cristianos coptos en Egipto también sufrieron mucho y continúan sufriendo hoy, ha habido intolerancia constante hacia ellos, que el estado no ha investigado, incluyendo la continua desaparición de mujeres y niñas coptas.

La población kurda en el Oriente Medio también ha tenido su parte de la persecución; como se mencionó anteriormente, es una población de alrededor de 50 millones de habitantes, conocida como la nación apátrida más grande del mundo. A lo largo de la historia kurda, las naciones vecinas han perseguido a los kurdos en su propia tierra, prohibiendo su lengua, llamándolos "turcos de montaña" en el caso de la región kurda de Turquía, deteniendo a los periodistas que exponen las atrocidades cometidas por las fuerzas turcas, hasta el genocidio kurdo y campañas de limpieza étnica llevadas a cabo por el gobierno iraquí a mediados de los años ochenta.

La razón por la que estas naciones y otros en la región han sido perseguidos es simplemente porque se negaron a someterse, ellos son los últimos en no hacerlo. Como hemos observado, durante los últimos 1400 años, la arabización del Medio Oriente ha sido un proceso continuo.

Como hemos observado, durante los últimos 1400 años, la arabización del Medio Oriente ha sido un proceso continuo.

Llegamos a la situación actual, la crisis de refugiados en Siria e Irak. Cuando se les pregunta por qué no abren sus puertas a los refugiados sirios que huyen del Estado Islámico, los funcionarios de los países ricos en petróleo como Arabia Saudí, Kuwait y Emiratos Árabes Unidos han dado excusas como “nuestros estados son demasiado valiosos para permitir que los refugiados sirios se reasenten”, y otro expresó que la cultura siria es "ajena" a la región del golfo.

En resumen, cuando se trata de acumular riquezas, invadieron y conquistaron a lo largo y ancho, hicieron que estas naciones creyeran que eran árabes, inculcaron un sentimiento de falso patriotismo en ellas y las llamaron hermanas; pero cuando se trata de hacer su deber fraternal, o incluso de bienvenida, los estados del golfo han expuesto su mentira –o su verdad- de 1400 años... que son realmente culturas que son ajenas entre sí. No existe la “Hermandad Árabe” y ciertamente no existe una “Patria Árabe desde el Golfo hasta el Océano”, como rezan canciones transmitidas durante décadas en radios oficiales.

Fuente: Progressmemag.com Traducción: Hillel Shammai

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